Muchos cambios de amor

Si no tenés el peso de una relación fija sentís que disfrutás más de tu liberad. Estás en esa etapa en la que cambiamos de pareja muy seguido? Si la respuesta fue sí, te pasamos algunas reglas y consejos para que puedas manejar tus romances exprés.

Lo más importante es tu libertad, el resto se puede negociar. Podés salir con varias personas a la vez, te divertís, tenés sexo y después que cada uno se arregle como quiera y como pueda. No te enganchás en esas idas y vueltas de si me llama, no me llama, lo invito yo, etc. Simplemente no te interesa si volvés a verlo o no.

La tan esperada soledad
Es probable que después de una relación larga (o no tanto) necesites un poco de espacio y tiempo para vos... tenés que poner tu vida en orden nuevamente. Esto implica salidas, diversión, touch and go o cómo quieras llamar a las relaciones sin ataduras. Es normal que quieras conocer y aprender cosas nuevas, aspectos de tu vida distintos que incluyen nuevas maneras de amor.
Un dato interesante para las mujeres: al parecer tenemos como un sexto sentido para saber encontrar los que buscamos. Entonces, si lo que querés es divertirte sin tener que preocuparte por quién llama, vas a buscar hombres con rasgos masculinos... muchas veces hablamos que este tipo de espécimen parece ser el mejor a la hora de llevarlo a la cama.

Un poco acá, otro poco allá
En este momento estás decidiendo qué querés de tu vida, estás realmente dónde te hubiera gustado? Quizá no te sientas lista para una nueva relación. Hay algunas mujeres que eluden el compromiso para evitar estar atadas a un hombre, pensando que manejan tu vida. También puede pasar que no quieras una relación estable y escapes antes que la relación se termine, por miedo a terminar juntando pedacitos de corazón otra vez.
El problema de escapar y escapar es que no te sirve por mucho tiempo, es una estrategia que puede jugarte en contra: cuando te gusta de verdad y es recíproco, no hay fuerza que evite que te enganches. Mejor pensá en lo que querés y estate atenta a no tropezar con la misma piedra o dejar pasar una oportunidad por temor a salir lastimada.

Rompecabezas
Como no existe el hombre (ni la mujer) perfecto vamos armando un gran “muñeco ideal”. En la agenda tenés al divertido que te invita a las mejores fiestas, el dulce que te escucha cuando estás bajoneada, el caballero que le presentás a tus amigas y al infaltable guerrero del sexo. Cuando te fijás en un solo aspecto de la persona, la relación es superficial, no podés crear un vínculo con alguien al que conocés por arriba o destacás una pequeñísima parte de su personalidad.
Si por el contrario esperás encontrar al príncipe azul de tus sueños con todas las características de los cuentos de princesas, lo más probable es que te la pases de desilusión en desilusión.
Tranquilos, vamos a encontrar a esa persona que es para nosotros.. no tenemos que forzarnos a relaciones que no nos convencen o no cierran.

Del equivocado a.... uno peor
No es el destino el culpable de tu mala suerte en la selección de candidatos! Sólo vos sos responsable de elegir y equivocarte, volverte a equivocar y chocarte contra la pared. Es necesario buscar en nuestro interior las respuestas a estos errores. No es casualidad que te toquen hombres con personalidades parecidas, te ponés en el mismo rol de la relación anterior (madre, amiga, novia celosa).
Cuando una relación se termina es recomendable que te tomes un tiempo para pensar en los puntos que no funcionaron y tratar de aprender de esas equivocaciones. Así estás un poco más preparada y evitarás las malas decisiones (por lo menos un poco).

Quiero libertad!
Sacate de la cabeza la idea que una relación te obliga a resignar partes de tu vida. Una no tiene que estar soltera para escaparse un fin de semana con las amigas, juntarse con las chicas a cenar o ir a un bar, empezar otro carrera.. lo que se te ocurra. Por el contrario, las parejas suelen acabarse cuando no tienen libertad, espacios ni tiempos, están todo el día uno con el otro, lo que termina asfixiándolos.

Todo tiene su tiempo
Establezcamos de ante mano que nadie tiene que estar de novia simplemente porque es necesario... tenés que estar bien y sentirte bien con la persona que tenés a tu lado, porque sí las cosas no se hacen. Es bueno estar acompañada, pero también tiene sus beneficios la etapa de la soltería.
Es fundamental para empezar una nueva relación que te sientas bien con vos misma, que estés segura de lo que querés... así vas a poder establecer un vínculo sano con otro. Es injusto que metamos como sea en nuestra vida a una persona porque no queremos estar solas, por la presión social, por la edad o el motivo que se te antoje. Cómo podés empezar una relación a largo plazo si todavía no te recuperaste de la anterior, si tu atención está puesta en miles de cosas a la vez y no tenés ni idea si querés o no estar acompañado?.

Todo es como vos querés
Qué linda es la libertad… hacés lo que querés, nadie te pide explicaciones... es un placer ser dueña de todo lo que sos y querés. Salís toda la semana, no salís y te quedás mirando pelis, no dormís en tu casa, invitás a tu chico a dormir.... Nadie te pregunta que hiciste, a dónde fuiste, por qué volviste tan tarde anoche. Tenés una lista de candidatos enorme y vas eligiendo con cuál arreglás y quién queda afuera este fin de semana.
Depende de cada una lo que dura esta etapa... a veces es bueno ir de hombre en hombre (aprendés mucho) pero va a llegar el momento en que precises definirte y comprometerte. Por eso tenés que pensar en lo que sentís y lo que querés... no podés responder a lo que se espera de vos porque es importante que tus deseos y necesidades guíen el camino. Estimados, son ustedes los que saben qué quieren, cuándo y cómo.