El poder de las caricias

A quién no le gustan las caricias? Cuando uno está acariciando al otro no sólo está enviándole determinados mensajes, sino que genera respuestas.

Además de generar placer en el otro, las caricias cumplen otras funciones en tu relación: desde fortalecer el lazo afectivo hasta contribuir a la máxima conexión sexual. Se calcula que entre un 60 y un 70% de nuestra comunicación es a través de gestos, posiciones y miradas. De todas estas formas, el tacto es la vía de comunicación no verbal más poderosa. Así como usamos las palabras para hablar sobre nuestros pensamientos, usamos el tacto para expresar lo que sentimos. Esto se da no sólo en las caricias, lo mejor que tiene la comunicación no verbal es que uno la realiza de forma inconsciente, es decir que no se da cuenta de lo que está transmitiendo. Se puede mentir y ocultar con las palabras, pero es muy difícil engañar a través de los gestos.

Los diferentes toques pueden ayudar a expresar distintas necesidades emocionales. Vamos a hablar de seis necesidades y sus respectivas posiciones.

Necesidad 1: Unirte
Posición clave: cara a cara
No existe nada que los acerque tanto como unos minutos de caricias mirándose. Nos comunicamos principalmente a través de los ojos, si mantenés la mirada fija, vas a dar la impresión de que deseás un contacto más íntimo. Si querés aumentar la intimidad, recuéstense en la cama, frente a frente y abrácense. Para muchas parejas estar lo suficientemente cerca como para sentir el aliento y escuchar los susurros del otro es un increíble punto de conexión. A las mujeres el contacto visual intenso nos hace sentir emocionalmente unidas.

Necesidad 2: Demostrar afecto
Posición clave: Recostarse sobre su hombro
Tomarse de la mano no es la única forma de mostrar afecto, también podemos recostarnos en su hombro. Lo mejor de este mimo es que podés hacerlo en cualquier lugar, sólo basta que estés sentada a su lado y al recostarte, él te rodea los hombros. Si estás en público este gesto de amor es dulce y no es una demostración excesiva, pero evidencia que vos y él tienen un intenso nivel de comunicación con el otro, que se sienten confiados y contenidos.

Necesidad 3: Conectarse después del sexo
Posición clave: Cucharita
Estos momento clásicos no deberías ser desperdiciados. Durante el sexo, ambos están literalmente sumergidos el uno en el otro. Para mantener viva esa cercanía física invitalo a que te haga unos mimos ubicándose detrás tuyo. Al hacer esta posición el hombre se sienta poderoso y masculino, es cómoda para él. Otra posibilidad es que vos te coloques detrás, de esta manera, alineando tu cuerpo con el suyo, le estás haciendo saber que aun después de tener relaciones, querés estar cerca.

Necesidad 4: Relajarse
Posición clave: Presión en el pecho
Tuviste un día pésimo, en vez de sentarte al lado y despotricar sobre todo lo malo de tu día, pedíle que se tire boca arriba y luego recostate sobre él con tu cabeza en su pecho. Así escuchás el sonido de su corazón, en minutos te vas a sentir más tranquila y protegida. Esta posición le va a hacer saber que todavía lo necesitás y que es tu sostén. Si es él quién necesita relajarse, cambia la posición, o sea, el que se recuesta tiene que ser él.

Necesidad 5: Que se sienta protector
Posición clave: Recostarte sobre su regazo
Tenés que recostarte sobre sus piernas de modo que tu cabeza descanse sobre sus muslos, de esta manera se crea una entrelínea de sumisión sexual que sirve para que el hombre se sienta primitivo y masculino. El hecho de que él esté físicamente más alto que vos, ayuda a que se sienta fuerte y listo para protegerte. Además sus manos y piernas están libres para moverse, por lo que no se siente atado. En esta posición va a morir por acariciarte.

Necesidad 6: Excitarlo
Posición clave: Franeleo sexy
Cuando estés con ánimos particularmente seductores, probá con esta posición para que los dos estén en la misma sintonía. Hacé que se siente en una silla o en el borde de la cama y acomodáte sobre su falda, mirándolo a la cara. La naturaleza física de esta posición y el hecho que estas sentada sobre él son factores excitantes, además la estimulación visual aviva el fuego. Si querés subir más la temperatura, abrazalo, besa su cuello suavemente mientras giras lentamente tus caderas ejerciendo presión. Los besos y esa presión aluden al sexo, pero sin ser explícita, es un “sí, pero no” que es estimulante.

Bueno, estos fueron los 6 tipos de caricias de hoy. Ahora los sabés, tenés en claro para qué es cada uno y la posición que te permite conseguir eso que necesitás. Sólo falta que lo pongas en práctica! Después nos cuentan como te fue....


Fuente: revista Cosmopolitan, julio 2007.