Hablamos de los adictos al amor, explicamos algunos tipos de caricias, las necesidades y lo que significan, nos divertimos y aprendimos algunos tips con Paola Kullock y además nos olvidamos de nuestros exs y empezamos de nuevo. Es momento de centrarnos en un nuevo amor y charlar sobre cuáles son los miedos que todos tenemos para volver a enamorarnos.
Pensemos en cómo nos sentimos cuando venimos de una historia que terminó mal o de una serie de fracasos amorosos que nos dejaron bastante sensibles y desconfiados. Es muy probable que las primeras ideas que te vienen a la cabeza tienen que ver con que tengas miedo a que te engañen, te abandonen, estén con vos por despecho o que huyan si decís lo que sentís.
Que sientas un poco de paranoia es normal, pero no exageres! Esto se puede convertir en una traba, que te impida llevar adelante una relación como tendría que ser. Relajate porque la mayoría de estos miedos románticos no tienen fundamentos, pero ojo... pueden funcionar como profecía autocumplida.
Vamos a hablar de los siete miedos más comunes que pueden interferir en tu relación:
1. Soltero para siempre
Parece ser que cada vez nos comprometemos menos y decidís convertirte en una pesada para que no se te escape... puede pasar lo contrario: se cansa y se va. Esta conducta de estar encima del otro siempre demuestra que tu autoestima está por el piso.
Qué hacemos? Relajarse, ir despacio.. dejá que la relación siga su propio ritmo... como dice un amigo: “que fluya”. En vez de obsesionarte con lo que debería ser, despertate cada mañana pensando lo bueno del presente!
2. Una vez más van a lastimarme
Quién no pensó esto alguna vez? En algún momento estuvo presente el pánico a terminar con el corazón en mil pedacitos. Pero cuando uno está en pareja no puede vivir pensando en eso... en vez de hacer foco en lo bien que te sentís, andas por los rincones anticipándote a un final que “sabés que va a llegar”. Cuando se espera un desenlace doloroso, se actúa en consecuencia y es uno mismo quien provoca que lo que más teme pase.
Qué podés hacer? No te preocupes por algo que todavía no pasó y ni siquiera sabés si va a pasar. Preocuparte por un futuro que sólo está en tu imaginación es la peor manera de arruinar el presente, mejor disfrutalo.
3. Todo cambia cuando nos conocemos mejor
Todos nos sentimos vulnerables en algún aspecto de nuestra vida. No somos lo suficientemente lindos, inteligentes o divertidos, siempre algo hay. No podemos pensar que sólo siendo excelentes evitamos el rechazo.
Cómo manejamos esta situación? No dejemos que estos miedos controlen nuestra relación. Es necesario saberlo todo, ser el más lindo o el centro de las fiestas para merecer el amor de alguien?? Recordá que nadie es perfecto y además, quizá él o ella ni se dieron cuenta de esas cosas que te torturan, o mejor todavía, lo sabe pero no le importó.
4. Es imposible confiar
Una sucesión de infidelidades provoca que pensemos que todos nos van a engañar. Otra causa para dudar de la fidelidad es que uno de nuestros padres no haya cumplido con lo prometido o tenía doble discurso, lo más probable es que de adultos no podamos confiar en la pareja que tenemos.
Qué hacemos en este caso? Si pensás que tu miedo tiene fundamento, juntá coraje y plantea las cosas. Si sólo está en tu cabeza, desafía esa negatividad pensando que cada persona es única y es injusto que pague por las culpas de otro.
5. Perder la individualidad
Algunas personas se ponen de novio y dejan de ver a sus amigos y familia y ni siquiera se dan cuenta. Otras pueden llegar al punto de temer perder su espacio, entonces si sentís que perdés tu individualidad cuando estás con alguien, pasas de estar demasiado disponible a cerrarte en vos misma para protegerte.
Y ahora qué? Pensá en lo que querés de la relación. Sentate y hablá sobre tus expectativas y no renuncies a ellas. No es imposible compartir momentos con tu pareja y al mismo tiempo continuar con tu vida... Ya habíamos hablado sobre la importancia de pasar momentos separados, mejora la calidad de los momentos juntos... está bueno extrañarse un poco!
6. El recuerdo de su ex
Basta de la tonta obsesión con su ex. No podemos estar constantemente comparándonos con los ex. Nuevamente tenemos un problema de baja autoestima. Además los celos pueden ser tan destructivos e irracionales que terminan alejando a la persona que queremos conservar.
Qué hacemos si los celos nos torturan? Entendé que también tiene un pasado, que vivió la vida igual que vos y pasó por situaciones similares. No le des vuelta a los ex y no te compares, ahora están juntos y disfrutan cosas de los dos.
7 Declaración de amor y huída
Quién es el primero en declararse? Será demasiado pronto para decirle que lo quiero o lo amo? Cuantas veces se hicieron esta pregunta! Al miedo real a no ser correspondidos como quisiéramos se suma el miedo infantil a ser rechazados. Esto impide que expresemos lo que sentimos cuando simplemente no hay nada real que indique que nos vayan a abandonar o humillar por mostrar lo que sentimos.
Qué hacemos en esta situación? Sé honesta con lo que te pasa, no tenés que declarar amor eterno pero al menos demostrá algo de lo que sentís... por mas que quieras la otra persona no puede adivinar lo que estás pensando. Jugate por lo que te dice el corazón, sino para qué seguís en esa relación?
Pensá en todos estos miedos comunes que enfrentamos cuando comenzamos una relación con alguien. No son tan graves y podés afrontarlos. Lo más importante es ser sincero, claro y disfrutar el momento que pasan juntos, no te enrosques en el pasado y no dejes que un futuro catastrófico que sólo está en tu imaginación arruine lo bien que te sentís hoy.
Fuente: Revista Cosmopolitan, Febrero 2006
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